La verdad es que la parte exterior a mi parecer deja mucho que desear, un simple cilindro construido con ladrillos de vidrio (quizás esto último lo único original de la construcción) lo cuál al dirijirme hacia la Estación para ver el monumento desde el interior me hizo pensar que no me iba a sorprender mucho. El caso es que al llegar al interior no tenía nada que ver con la desilusión que me causó al observarla desde la calle. La iluminación, el color de azul de la sala (denominada Vacío Azul)...sin duda para comprender el sentido del monumento, tiene que ser vista "desde abajo" y contemplar lleno de luz la multitud de mensajes que componen el interior de la cúpula de vidrio.
"Hace falta mucha fantasía para soportar la realidad", "Ahora hay un vacio, un silencio", "No olvidemos nunca que la violencia es el fracaso de las palabras". Estos son algunos de los mensajes plasmados en la membrana que cubre el interior de la cúpula y que están llenos de sentimiento y recuerdo a las víctimas.
Además hay que recordar que al comenzar la visita en la "sala azul", están plasmados los nombres de las 191 víctimas que perecieron en este fatídico atentado y que en cada rincón se intenta recordar.